¨Ambivalencia de la ciencia y la tecnología en el desarrollo del mundo actual¨

Perspectiva social y humanista del desarrollo tecnológico

Objetivos:

  • Solucionar mediante el conocimiento científico los problemas de nuestro entorno.
  • Desarrollar habilidades y capacidades creativas individuales y colectivas en materia científicas y tecnológicas.
  • Elevar la calidad de vida de las sociedades a través del uso de las herramientas tecnológicas.

Introducción:

Las relaciones entre ciencia y sociedad han pasado por diversos momentos a lo largo de la historia. En la actualidad dichas relaciones están marcadas por la ambivalencia y la incertidumbre, las cuales generan diferentes desajustes en y entre ambas esferas. 

De un lado el avance de la esfera tecno científica, de otro lado el desfase y la percepción de amenaza que sufren las sociedades respecto a tal desarrollo. Tales acontecimientos están poniendo en manifiesto la necesidad de replantearse tales relaciones de acuerdo con parámetros que traten de poner en mayor contacto ambas.

Desarrollo:

Las relaciones entre la institución social de la ciencia (la comunidad científica),la sociedad en general y el público del conocimiento científico en esencia, de los cuales han estado regidos por la ambivalencia y últimamente por la incertidumbre y el riesgo.

Desde hace medio milenio, la ciencia se ha ganado un reconocimiento social creciente por efecto de la utilidad que se imputa al conocimiento experto, tanto por su contribución a la educación de una personalidad cultivada como por su invención de conceptos de técnicas e instrumentos que incrementan la capacidad humana de predicción y control.

El propio rol institucionalizados del investigador científico está asimismo regido por la ambivalencia en lo que se refiere a las normas de de comportamiento profesional. Robert K. Merton, fue quien analizo y definió las condiciones ideales en las que los científicos deberían producir, juzgar y publicar sus trabajos de formas comunitaria, universalista, desinteresada y críticamente escéptica (escepticismo organizado) de acuerdo ha aquellos imperativos morales que regulan la competencia por la prioridad en la investigación y que constituyen el Ethos de la ciencia. Estos valores son el sustrato último de la institución científica, el cual necesita de un entorno social, político y económico, que por un lado eluda cualquier influencia sobre ella, y por otro lado, provea los diversos mecanismos  y apoyo para el desarrollo del conocimiento científico. 

La ambivalencia ínsita tanto en los papeles sociales de los investigadores como en el funcionamiento institucional de la comunidad científica, la cual es considerada a través de los años como un interesante problema sociológico y un problema social casi irrelevante. El desarrollo económico postguerra y el crecimiento de la tecnociencia en todas las dimensiones materiales y humanas sugiere que, de alguna manera, los científicos resolvían eficazmente los problemas prácticos que iban surgiendo por efecto de la interpretabilidad de las expectativas sociales adscritas a su status. En la actualidad la globalización de la competencia económica y de problemas sociales como crisis ambiental o la masiva reorganización productiva y comercial, unida al estancamiento de la financiación pública de la investigación, genera una tesitura crítica y de elevada incertidumbre.

La tecnociencia se halla bajo fuego cruzado, ya que diversas empresas y Estados, demandan una intensificación de su aplicabilidad, especialmente en el área de producción, sin embargo agentes sociales como (sindicatos, consumidores, ecologistas, feministas, etc.) exigen que sus resultados no puedan ser usados en el aumento de los desequilibrios sociales y ambientales ni empeorar dichos efectos.

La autoridad y credibilidad de la ciencia, no como institución, sino como cuerpo de conocimiento, ha llegado a estar parcialmente en entredicho. A causa del éxito social de la ciencia, los científicos impulsados por la necesidad de nuevos recursos, han propuesto a la ciencia como fuente de solución de todos los problemas de las sociedades, los políticos han comenzado a delegar en ellos algunas decisiones al respecto, comprobando los resultados a través de la investigación científica. Esto a suscitado una demanda inmediata de responsabilidad (accountability).

Como consecuencia de un nuevo y minucioso escrutinio de las prácticas científicas (Edge, 1995; Barnes, Bloor y Henry, 1996; Pickering, 1996) se ha vuelto relevante las convenciones sociales imprescindibles para la producción de nuevos conocimientos: el conflicto por el mantenimiento de fronteras disciplinares, la negociación de los supuestos factuales, teóricos y técnicos que organizan la investigación empírica, los juicios situados sobre el significado de los resultados obtenidos y publicados, de las disputas sobre los criterios de competencia técnica de los investigadores, etc. Dos rasgos propios de la ciencia, usados de modo sistemáticos pero a la vez no público para la renovación del conocimiento, como son el escepticismo y la desconstrucción de la tradición especialista recibida, son ahora públicamente observable y lo que es más importante accesibles a los agentes sociales no especializados como científicos profesionales.

Si la nueva ambivalencia del conocimiento científico obedece a su definición como conocimiento objetivo, natural, cuando es visible un producto parcial de decisiones sociales y convencionales, la incertidumbre emerge del papel hegemónico de la tecnociencia en el momento presente como causa (consecuencia inesperada de la acción), instrumento de definición (tecnocracia y cientificismo) fuente de solución de riesgos (depositaria tradicional de la idea del progreso ilustrado), de tal manera que el desarrollo científico técnico se hace contradictorio por el intercambio de riesgos, por el mismo coproducidos y codefinidos, y su crítica social (Beck, 1998:24). La solución de tal diagnóstico pasa por una adecuada educación del público que no se reduzca a un aprendizaje fragmentario del saber admitido actual, sino que ofrezca una comprensión de la autoridad científica nacida del estudio social de dicha profesión. De  este modo, el conocimiento científico podrá constituirse en un recurso para la acción social cuando agentes ordinarios contemplen su adquisición como un proceso activo de interpretación, no simplemente como recepción pasiva de información acreditada como experta. No obstante, es preciso observar que este planteamiento asume de partida la distinción ordinaria entre productores especializados de la ciencia y consumidores lejos de ese conocimiento. En cierta medida, la propia institución científica, tal y como hoy la conocemos, es fruto de la consolidación de esa distinción social, que en otro tiempo fuera más difusa. Es quizá esa demarcación tajante entre ciencia y público la que podría estar en la raíz de los problemas de las relaciones actuales entre la tecnociencia y la sociedad.

Conclusión:

Como consecuencia de cuanto se ha expuesto, en la actualidad se están desarrollando diversas perspectivas ligadas a los estudios sociales de la ciencia y la tecnología, que a la vez rechazan la existencia de un significado unívoco del conocimiento científico, como si éste viniera impuesto objetivamente por la naturaleza o alguna autoridad privilegiada, cuestionando el significado de tecnociencia y su comprensión pública.  Al margen de la visión formal d, validada y cerrada de la ciencia, esta nueva perspectiva aborda las relaciones entre la comunidad científica y la sociedad más ampliamente como un encuentro de diferente culturas.




Bibliografía 

Continental, U. (2015, 25 mayo). Taller internacional de investigación científica y tecnológica [Vídeo]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=-zB0Fdm58N4&feature=youtu.be

Generales, Z. E. B. (2021, 13 mayo). El desarrollo científico y tecnológico [Vídeo]. YouTube. https://www.youtube.com/watch?v=qRe7jqeJ2Sc&feature=youtu.be

colaboradores de Wikipedia. (2020, 4 septiembre). Ambivalencia. Wikipedia, la enciclopedia libre. Recuperado 26 de agosto de 2022, de https://es.wikipedia.org/wiki/Ambivalencia


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